He estado reflexionando mucho sobre el manifiesto de mi consulta, mi visión o como queráis llamarlo. Y he decidido compartirlo con vosotros porque me parece importante que me conozcáis y sepáis cómo es mi consulta y qué podéis esperar de ella cuando venís.
No depende de mí que te quedes embarazada. Tampoco depende de ti. Por supuesto que vamos a trabajar juntos en esto pero no puedo darte una garantía. Los hijos son un don. Y los da Dios. Si quiere. Y cuando quiere. Vosotros, y también yo, somos instrumentos en esta historia, y estamos a Su servicio. Cuanto antes integremos esta realidad en nuestra historia, ¡más salud física, mental y espiritual tendremos! Más felices seremos. Lo he visto cientos de veces en mis pacientes.
![](https://helenamarcos.es/wp-content/uploads/2023/11/Manifiesto-2-1024x1024.jpg)
Esto sí que te lo prometo. Voy a hacer todo lo que esté en mi mano para que mejores. Voy a estudiar más, voy a usar todo lo que he estudiado, voy a estar atenta si salen cosas nuevas y a intentar exprimir los encuentros y congresos. Voy a estudiarme vuestro caso otra vez, voy a modificar la medicación según mi leal saber y entender y voy a apoyaros en todo lo que necesitéis. Si necesitáis asesoría sobre asuntos éticos, pastorales, o cualquier consulta tenemos a las personas que componen Naprotec para ayudarnos. Si necesitáis derivación al psicólogo, sexóloga, orientador o sacerdote, tengo personas fantásticas en el equipo del COF. Si os hace falta tomaros un respiro, saber cuándo parar, hablar de adopción, de acogida… ahí estaré para acompañaros
![](https://helenamarcos.es/wp-content/uploads/2023/11/Manifiesto-3-1024x1024.jpg)
Eso la mayoría de vosotros, lo sabéis. Es un camino poco transitado, una puerta estrecha y una cruz. Requiere perseverancia, constancia, amor, esquivar obstáculos y no cansarse nunca de estar empezando siempre. Requiere ánimo, alegría, saber sacudirse la arena del camino y mirar hacia delante.
![](https://helenamarcos.es/wp-content/uploads/2023/11/Manifiesto-4-1024x1024.png)
Esto también puedo prometértelo. Quererte implica que a lo mejor alguna vez tengo que decirte algo triste, o desagradable, que no me gustaría ni a mí decir ni a ti oír. Pero te voy a ser sincera, eso siempre. Y te voy a querer de corazón. Porque eres parte de mi fecundidad. Porque Dios te ha puesto en mis manos durante un trocito de nuestra vida.
![](https://helenamarcos.es/wp-content/uploads/2023/11/Manifiesto5-1024x1024.png)
Como te digo, tengo claro que a mí los pacientes me los manda Dios. Ni mi marketing, ni nada. Mi marketing sois vosotros, que me elegís día a día para ser vuestro médico y vuestra amiga. Como os manda Dios, Él debe encargarse también de vosotros y yo os pongo en Sus Manos de Padre todos los días.
![](https://helenamarcos.es/wp-content/uploads/2023/11/Manifiesto-6-1024x1024.jpg)
Ahora y siempre queridos pacientes, ¡estamos juntos en esto!
El camino no es vuestro, ni mío, es NUESTRO.